Una vez pasada la fecha del 12 de febero - ¡remember!- aquel espíritu de Arias Navarro, el carnicerito de Cadid, se aproxima San Valentín. Anoche, doce, en La Alacena, mientras tomábamos un vino Juan Manuel Arribas, Rafa del Moral y éste de vosotros, apareció Pablo González, pidió el vino correspondiente, se apartó de la cuadrilla  a una mesa cercana y, cuando  acabó la copa, nos entregó este poema:
 
  PABLO GONZÁLEZ JIMÉNEZ
   
  Yo me pido la luna
  doble bajo tu espalda,
  la noche más oscura,
  la más estrecha cama;
  que los labios nos busquen
  y las manos, canallas,
  pulsen secretos, dulces 
  lamentos de guitarra.
  Yo, alrededor y ombligo
  de ti, que eres mi casa,
  eternecer me pido 
  contigo: polvo al alba…
   ¿ En quién pensaría al escribirla? ¿Quién desearías que te la dedicara pensando en ti de esta manera? ¿A quién se la dedicarías tú?
 
2 comentarios:
Ya veo, ya veo que la luna llena de febrero va ejerciendo su influencia y eso que aún no ha llegado.
Bonito y erótico poema. Felicidades a Pablo de mi parte
Opino sobre el poema lo mismo que Luz.
Respecto a la luna, creo que da lo mismo; febrero, marzo, abril..., tu no cambias.
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