domingo, diciembre 31, 2006

ULTIMO DÍA DEL AÑO

La mañana, un tanto resacosa, se llenó pronto de otras sensaciones: contacto telefónico con Beatriz muy preocupada por el tema del atentado de ayer. Le hice un resumen de loque pueblicaba El País.
Después, manifestación a la puerta del ayuntamiento. Allí estaban la gente de PSOE y un grupo de protección ciudadana. También Julio y Luz. Luz me había mandado ya su poemario "Otra música para la luna". Quiere que lo edite. Lo estudiaré. Longina vino con el fin de preparar la cena de esta noche. Miro los correos y nadie contesta ni pincha en mi Blog, al menos para opinar. Sería interesante poner un marcador de visitas.
Me consta no obstante que Antonio, el director de El diaria de Alcalá sí conoce el blog, éste o el otro, según me dijo la noche de la cena, el ya lejano 21 de diciembre, es decir hace diez días. Y diez días sin resuello. Las tardes largas y monótonas no acallan los recuerdos recurrentes...
La nostalgia de la nada...

lunes, diciembre 18, 2006

VIERNES 15

La tarde se llenó pronto de emociones. El autobús, más rápido de lo esperado, llegó pronto a Conde Casal. Desde allí en matro hasta Tribunal. La primera sorpresa: el bar no se llamaba La Mina sino Bukowski.El nombre me sonó mejor. El poema titulado "como serun gran escritor" resulta inolvidable. Los anfitriones, simpáticos y aficionados a las letras no dejaban de mostrarse pragmáticos: "Esto es un negocio, las letras un medio para que esto viva", comentó el empañolado pirata que se afanaba detrás de la barr, delante del mecrófono y al rededor de los asitentes.
Aparecieron por allí dos caza talentos buscando escritores " emergentes" - su palabra favorita- para una editorial que ellos vendían como hermana de Planeta y que aparecerá en marzo.
También llegaron los amigos de Juan Manuel: lo típico y lo tópico: el médico, la antigua tía buena, el simpático, el circonflejo, todos contentos. Había alguna ausencia: nueva llamada y el teléfono contesta con la voz artificial que pide el mensaje. "Te sigo esperando...!" ¿Qué otra cosa se podía contestar?
La presentación por parte del argentino entrañable. Se decidió el por leer uno de mis párrafos que le entusiasmaron. Cuelgo aquí todo este apartado del capítulo amores de Verano:

EL AMOR ENTRE REJAS

Ella también fue niña. Miró al muchacho y se prendó. Pasó algún tiempo, lo suficiente para que el amor floreciera. Encontró otros amigos que no conocía, otras ilusiones que no imaginaba. Aquellos ojos negros descompusieron la razón. Proyectaron una vida común más allá de la lógica. ¿Cuándo no ha dictado el corazón las razones? La vida discurrió deprisa por las autopistas del frenesí. No encontraron trabas en ninguno de los vericuetos. Ningún ave por real que fuera les dejó bajo en su arriesgado volar. El muchacho de los ojos negros había diseñado viajes entusiastas por laberintos tortuosos. Todo fue posible. ¡Qué atrás habían dejado el barrio, el pueblo, la ciudad! El mundo se fundía en riesgos con adrenalina. Las cuentas se pagaban con visa oro y las pensiones se habían convertido en hoteles de cinco estrellas. Todos los sueños de cenicienta se habían convertido en realidad. Desde el traje blanco de novia al irás y no volverás. El más allá sólo representaba el paroxismo de lo posible, el atrapar en un segundo toda la vida. Hasta que un día llegó la calma. Bajaron juntos del mismo avión, pero les separaron bruscamente y no se volvieron a ver en varios meses. Las noticias de uno y del otro llegaban alambicadas por mil filtros. Los abrazos se habían tasado y los besos se resumían en un cuerpo a cuerpo muy de tarde en tarde.
La calma obligada conducía el aburrimiento, a la sinrazón que nunca había abandonado. Suponía el observar, el mirar por matar el tiempo, ahora que disponía de él involuntaria pero absolutamente. Pasó lo mismo que entonces. Se cruzaron otros ojos negros. En esta ocasión no hubo cita, ni encuentro casual ni promesas de eternidad. Sólo una mirada asustada, carente de futuro, ambigua y suplicante, desesperada y perdida. Huidiza. Fue un relámpago, la fracción de segundo que necesitaba para encender otra vez el motor de explosión. Aceleró en la pista de ensayo, corta y tosca, parda, con paredes de ladrillos y vistas a las rejas. Buscó, encontró la comunicación de ensanche. Ahora anhelaba navegar los océanos de la tristeza en otra carabela pirata. Por eso solicitó y consiguió la carta de embarque hacia los mares del sur en el último esquife que llegó a su puerto.
Pero el patrón de la anterior travesía se consideraba con los derechos de propiedad. A ella le dieron el placet, a él se los negaron. El capitán de los versos presentó la artillería. La tripulación se reía porque el patrón pretendía la imposibilidad de retener corazones a fuerza de papeles. La sarracena se escapaba con el último grumete en busca de las imposibles islas del tesoro.
A ella, sólo le restaba la libertad de soñar, y la ejerció. Nunca nadie lo puede impedir.
Y luego el taxista borde, el cambio de taxi y la llegada a Velilla...

sábado, diciembre 09, 2006

MÁS SOBRE LA BAILARINA

Esta mañana,¡por fin!, he terminado de corregir. Inmediatamente la he enviado a Rafael. He seguir escribiendo la intra historia la novela y los diversos encuentros. Puede dar cabida a otra novela. La cocina de la novela o el reposo del cocinero.

jueves, diciembre 07, 2006

A VUELTAS CON LA BAILARINA

Susana me ha regalado un cuadro en el cual da su visión de la bailarina. Lleva un sombrero negro con una cinta de alas de pájaros tropicales. El sombrero, de ala ancha, tapa los ojos de la maujer. Deja ver su nariz romana, sus labios rojos con lunar, sus orejas con pendientes. El cuello delgado y fino, se une a una espalda escotada, tapada con una camisa amplia y vaporosa de cuadros blancos apenas insinuado por ténues líneas negras. El pelo lo recoge una horquilla imaginable que cubre el sombrero, en una coleta que tira a moño.
Esta es una parte. La siguiente es la insistencia de José Manuel Arenas, el de los perros y de Rafa por la edición de ambas novelas. Rafa dice que la edita él. Se la enviaré, pero no tengo portada. Experimentaré a ver la nueva fórmula de esa edición electrónica.
La tercera parte de la Bailarina es la emoción que siento aún y el cariño que tengo a los personajes. Es indescriptible y dificil de esxplicar. Cuando me puse a escribir esta parte me sobraban ideas, ahora se niegan a salir en el orden que yo creía que debían salir.

sábado, diciembre 02, 2006

Elena se va

Primeros de diciembre. Pub Donde Carlos o Don Carlos. Regentado desde hace un año por Elena, la Bilorusa. El apellido, enrevesado para mi, queda aparcado para otra ocasión. Elena y su hija, una adolescente de dieciseis años discuten amablemente detrás dela barra mientras me sirven un vino. El momento es oportuno de hablar de manera confidencial. La muchacha reprocha a la madre que se quiera marchar a Galicia. Alega que allí llueve, que está más cerca Pedro Muñoz en la Mancha. Que ella se queda con Jermán y Margarita. La niña repite que su madre"es un trauma" para ella.
La historia de Elena es interesante. Vino aquí invitada y se quedó. Vive en Velilla desde hace diez años. Allí, en Borisov, dejó un marido y un empleo de funcionaria. Era química. Es química. Ahora reina detrás de la barra del bar. Se podría hablar de amores y desamores. Hay una bella y larga histoira de atrevimientos y osadías. Pero prefiero preguntarle por la común amiga Larisa. También bilosurusa. Pero Larisa se quedó en Borisov. La última vez que vino lo hizo a cuerpo. Horas y horas de autobús atravesando Europa, la tierra prometida. Aquí se encontró con un trabajo temporal, buenos amigos y algún que otro amor, amores efímeros, como el verano, trágicos, tristes como ella misma, la nostalgia en su voz de cantante apasionado "¡Que tiempo tan feliz!". Largo de contar imaginación. Una novela apuntada en una de las libretas de Petronilo Marceliano Tardón. Novela para Paula Marta Temprano que ahora con la marcha de Elena hacia las tierras del norte se emparenta con el papel de Palmira Márquez Tierno. Demasiadas coincidencias. ¿Dónde quedó " oh mis barbas y tus melenas"? a la espera de ese rato largo de silencio y cuaderno, planificación y arroba necesario para escribir tres líneas seguidas. Saltan las rusas a la palestras desde el verano de Paris. Vuelve lo vivido, Sísifo eterno dando vueltas siempre a la misma rueda...
Por hoy basta.
He de conseguir dinero para cenar con Juan Antonio y Pilar Christian y Nini y por supuesto Beatriz. Daremos la vuelta al cuadro, lo decustruiremos con güisqui y amistad. Esta hiostoria, la de los amigos, se prolongo a lo largo de más de cuarenta años...
Y son años de amor y desamor, de encuentros y otros encuentros. Nunca hubo desencuentros....

jueves, noviembre 23, 2006

BUENAS NOCHES...

Son las doce de la noche. Termina el día y comienza otro. Treinta años han pasado desde que me entrevisté con el guerrillero asturiano Mata. Nadie sabe nada de él. La memoria histórica no existe. Me persigue el espirituo del maquis, no lo puedo evitar. Los recuerdos infantiles regresan inapelables. He leido esta noche la entrevista de la cual casi ni me acordaba. Se publicó en la Revista "PERSONAS" se debería leer. Pero me siento aún más emocionado porque he habalado con Asturias esta noche. Tierra desconocida y temida. Mi hermana, mi unica hermana, anda por allí. Florencio, mi sobrino, mi hermano, hijo de mi hermana, hermanos en el tiempo, ha leído lo que El País publica sobre Juan Antonio Canales. Emoción a tope. La copa de güisqui a esta hora disminuye. Juan Antonio, mi hermano de alma, presenta lo que siempre supo hacer: arte. Tan pocos días hace que presentamos la idea ya desarrollada: siempre lo mismo enesañar y dar confianza. ¿Como contar esto a quién piensa en los calcetines que le prestó el profesor de baile? Tres cañas son suficiente para un día, pero aún esperan cnciertos de jazz en cualquier café de Madrid. Suena la música en itliano " oh belloa ciau,ciau, ciau, ciau... y l a montaña". Asturias patria querida... y ¿Cómo no ? la marsellesa: "Allons enfants de la patrie..." y el mientras tanto de los italianos, que sólo se acordaban de "I l manifesto" y no de la profundidade de "el mientras tanto." La vida siempre es un mientras tanto... Mientras tanto estemos vivos somos coetáneos y contemporáneos con posibilidades de encontrarnos, discutir, abrazarnos, odiarnos,criticarnos y procrearnos, pero por enciema divertirnos, como ahora me divierto escribiendo estas chorradas....buenas noches...Pedro M. Talaván.

martes, noviembre 21, 2006

AMORES TARDÍOS

PENSANDO EN TI,
COMO AHORA PIENSO
Nos enamoramos sin querer. ¿Quién manda que una mujer se cruce en tu camino por razones de trabajo, aficciones o coincidencia en hora y lugar? ¿por qué la sonrisa y la mirada quedan colgadas al mismo tiempo? Estos comportamientos de adolescente se producen ya en la edad madura, pero ¿ son por eso amores tardíos? Tal vez sólo se trate de la permanencia de los juegos de seducción a lo largo de toda la vida, que no significan otra cosa que agarrarse al clavo ardiendo de la permanencia de la especie y del individuo. Pero enamorarse, y que le correspondan siempre es muy divertido. Bastaría poner cualquier poema clásico para corroborarlo.

sábado, octubre 14, 2006

SABADO MEDIODÍA

Una mañana entera escuchando música y jugando a las cartas después de leer la prensa. Beatriz se ocupa del jardín, las hojas amarillas cubren el suelo. No meha tocado el cuponazo y no hay nadie en su casa. El teléfono fijo da las señales correspondiente y de inmediato salta en contestador automático. Del libro de Charo Delicado no se sabe nada. La imprenta se retrasa, Paloma ha desviado su teléfono, pero el desvió no conduce más que al silencio con distinto tono, a ninguna parte en definitiva. He recibido la entrevista de Jose Manuel que hemos de enviar a Lola la alcaldesa. Quiere dedicarnos la última página del periódico local. Todavía no la he leído. José Luis me rellenó un cuestionario a la gallega con poca salsa. Y por ahí dadnodo vuelos la Chica Voladora y Paula Marta. La necesidad de meter mano a algo relacionado con los maquis de Cabezabellosa pero realmente deificil de hacer. Aún tendría ocasión de hablar con algunos de los que estuvieron presos, pero no es fácil.
Debería presentar una novela río con el nombre ficticio del pueblo.

domingo, octubre 08, 2006

LA VÍSPERA DE SAN CERVANTES

Día tranquilo de domingo. La monotonía de la prensa: lo más interesante, los crucigramas. Pero no podemos olvidar las eleccioones belgas ni los desatres de la justicia. Hoy, víspera de San Cervantes, mañana también festivo en Alcalá: días de vino y resaca...

TALAV�N TALAVAN CUENTA

TALAV�N TALAVAN CUENTA

sábado, octubre 07, 2006

SÁBADO POR LA TARDE

Anoche, después de la consiguiente discusión con Rafa del Moral sobre la publicción del libro "Velilla Abierta", salí a tirar la basura. Beatriz había vuelto a casa y mamá e hija se contaban las aventuras de un verano definitivo: se acabó la carrera y comienza la dura lucha por la vida. La muchacha aún no ha olvidado la facultad de clásicas y ronda de nuevo el campus complutense a la "recherche" de amigos y compañeros que comienzan a desaparecer de las agendas a la velocidad del tiempo, como sucedió siempre, como sucederá siempre. Bajé a tirar la basura, repito, y entré en el bar Donde Carlos. Elena, la bielorusa que regenta el local, leía novelas policiacas. Marina la ucraniana, empleada, sevía copas. Andaban por allí Santigo, debía ir ya por el quinto o sexto cubata porque se acercó a mí a pedirme perdón por una historia de la cual ni me acordaba, cuando ambos militábamos en el mismo partido. Yo lo había olvidado por completo porque para mí, el suceso fue más una escusa que una ofensa. En fin él, algún tiempo después, se fue del partido porque no consiguió sus ambiciones personales. Yo permanezco porque nunca he sido hombre de grandes ambiciones.
Pero no fue eso lo principal. Tambien tomaban copas Inmaculada la farmaceutica y su nuevo "boy". Un hombre enorme, ¡cómo le gustan a esta mujer los hombres grandes!, con pintas de sudamericano. Hablar tranuilo y melodioso. Un hombre culto. Hablamos de viajes y de teatro, les dí envidia contándoles mi reciente viaje a Florencia y los ensayos en el el teatro Puccini. Terminamos hablando en italiano, es un decir, porque yo me sé tres palabras e Inmaculada me regaló dos botellas de vino y dos de aceite. Parece que se ha metido a vinatera y a aceitera. Inamculada, me sospecho, también desea exportar vino como Rogelio García pero en vez de valerse de CCOO y sus viajes a Bruselas, se valdrá de los contacto que el anterior marido hizo atraves de las diversas compañías telefónicas de las que fue alto ejecutivo. Esa es histor para contar largo y tendido, si me pilla con ganas algún día lo hago.
Y habría que reseñar otro encuentro. Ayer, pero por la mañana me pasé por la redacción del Diario de Alcalá. Volveré a reanudar la colaboración semanal. No había llegado todavía Sonia Romero. Tenemos una comida pendiente. Esta semana cervantina parecía buen momento para celabrarla, pero esperaremos a otro.
He desempolvado los viejos diarios de Puebla de la Calzada y no resito a copiar una de las anotaciones:
"3-6-63. Por fin esta tarde en el recreo de entre los dos estudios de la nocche dijo el Sr. Director por alta voz: atención Radio Vaticano termina de anunciar el fallecimiento de Su Santidad Juan XXIII. Murió el día 3 de junio de 1963 a las 19 horas y 49 minutos."
Este mínimo apunte va dirigido a los nostálgicos. en otras ocasiones fecharé premios y castigos...

miércoles, octubre 04, 2006

HOY YA NO ES AYER, SINO MAÑANA...

Esta frase de j. Sabina tan llena de nostalgia y tan cercana en el tiempo, machaca mi cabeza con excesiva frecuencia. Aún hoy he de volver al funeral de Eugnio Montes. Quizá la única razón es que este blog nació precisamente como consecuencia de la noticia del funeral y la manera de conocerla. La hija de Eugenio y Lola llamó a casa para comunicar el acto. yo no cogí el teléfono. Ella fue explícita y escueta en el recado: "seguramente a pedro le apetecerá venir al funeral. Ruegale que lo comunique a los antiguos compañeros". El mensaje lo encontré escrito en media hoja de una agenda de años atraás. Sin duda un mensaje que intentaba unir lo que se vivió y lo que se viviría. Me preocupó sobre manera el ruego: "avisa a los antiguos amigos y compañeros". No me resultaba sencillo cumplir la tarea, aún así me puse a ello. Tengo un cajón a la derecha de mi mesa donde guardo tantas agendas como años y un sinfin de libretillas donde se aburren los pensamientos y las ocurrencias de muchos años, también de aquellos que viví en Puebla de la Calzada, mantengo diarios desde entonces. Busqué en el cajón posibles teléfonos de posibles contactos. Y me tropecé con varias dificultades: recordar nombres y situarlos en los años y las circunstancias. Me acardé de Joge Roa, lo busqué en Internet y dí con su colegio. Llamé y me dijeron que se encontraba de baja. Me acordaba de Emilio Ortega, pero no recordaba ninguna manera de localizarlo. Algo parecido de pasaba con Mena... Recurrí a buscar una página de angtiguos alumnos salesianos ý congué en el foro una llmada de auxilio. Encontré una dirección que podría llegar a Don Manuel Camargo y a´él me dirigí. Llamé a Allereiz buscado a Antonio Bahamonde, pero no lo encontré. Me acerqué por New Store. Una jovencísima muchacha- comenzará este año magisterio de música y dibujo-, montaba una película de de anime en el ordenador de su padre. Hablé con Luis. Supe las dificultades de él con la familia Montes, pero también averigüé que habían pasado por allí distintos compañeros de otros tiempos.
No me preocupé más. El día del funeral terminaba un curso de Educación Complensatoria y debía acudir a una cena. En medio, las nueve de la noche. El encuentro, un hola y un adios, rápido, - otra vez Sabina-, sirvió para rememorar una noche de reencuentro con Rogelio en el Coegio Mayor San Juan Evangelista y hablar de literatura con Emilio. Del San Juan había también otros recuerdos: Manolo Paniagua y Ellishabette. Pero esto sería otra historia.

domingo, octubre 01, 2006

YA UNO DE OCTUBRE

Debería haber continuado el mismo día 26 de sptiembre con este mismo diario, pero la noche se complicó en devociones sociales. El funeral reunió a los esperados. Por allí andaban Manolo Paniagua y su mujer Elitsabette, -la francesa de la aventura juvenil y la huida a Francia-, Rogelio García, metido a vinatero y exportador de caldos a Bruselas aprovechando su puesto en Comisiones Obreras, Manuel Bernal y otros.
Por supuesto que también acudió Emilio Ortega. Emilio Ortega merece un punto y aparte. Por eso aparece aquí de esta manera. Emilio Ortega sucedió a Pedro Almodovar en el coro de los curas cuando le echaron del seminario. Emilio Ortega sigue de músico. No compone las canciones para las películas del, ya por entonces, ilustre colegial, pero ameniza las noches inbsomnes de martrimonios con edades parejas a las nuestras en un bar cercano a la estación de Chamartín.
Pero emilio Ortega es el hilo que teje la tela de araña de estos hombres cincuentones que nos vimos en el funeral de Eugenio Montes. Emilio escribe sonetos y uno leyó en honor el amigo desparecido.
En la Iglesia Emilio me entrega un cuadernillo de poemas que ojeo y leo mientras el cura oficia. Ignoraba aún que Emilio leyera al final de la misa un poema. Emilio me pide el cuadernillo. Se levanta, le cedo el paso, sube al altar y desde el mismo púlpito que ha ocuapado el cura, nos lee emociando un soneto. Emilio llora. Pedro el hijo de Eugenio, se emociona.
Al salir Emilio me devuelve el cuadernillo y dice "es para ti". "Muchas gracias" respondo. Intervine Pedro Montes. "Me gustaría guardar una copia del poema que has compuesto en memoria de mi padre". "Yo te lo mando", se ofrece Emilio, "Toma el cuadernillo" intervengo yo.
"No sabía como pedírtelo" se disculpa Pedro Montes. "Pues como lo has hecho" intervengo. "Ignoraba si la propiedad intelectual lo permitía" arguye. "Como es mío puedo hacer con él lo que quiera" concluye Emilio.
Lorena Montes, la hija de Eugenio también se acerca a mi. Me ofrece fotos de su padre poco tiempo antes de morir. Le respondo que quiero verlas y le facilito mi correo electrónico. Pocos días más tarde recibo las fotos, pero esto es otra historia.
Abrazo a Lola la madre de los hijos de Eugenio, su primera mujer. Mi admira su entereza, si bien la enteiendo. Más de veinte años de conviencia, tres hijos, muchas ilusiones y algunos disgusto, entre ellos el abandono, se olvidan ante la nada total.
Los demás compañeros se despiden. Emilio y yo nos tomamos unos vinos. Hablamos de literatura y de la vida. Contamos muchas cosas en poco tiempo. Lo que aflora y preocupa en el momento exacto, el sustento de la vida, las ilusiones y los fracaso, el engarce del pasado con el futuro cuendo el presente es sólo un vaso de vino corriente en una cervecería de pueblo. Y al fondo la literatura, el afan de supervivir hecho de palabras.
Lo dificil que resulta escribir sobre estados de ánimo que se contraponen...
debería haber escrito esta entrada la misma noche del 26, cuando los sentimientos aún estaban muy vivos...
Volvermos sobre ello.

martes, septiembre 26, 2006

ANTES DEL FUNERAL

Eugenio Montes, a quien conocí hace muchos años, cuando aún los dos éramos niños, ha muerto hace un par de meses. Esta tarde se celebra un funeral en su honor. Eugenio llegó a Puebla de la Calzada en 19661. Pedro Almodóvar ya estaba allí. Per también corríamos por el mismo patio otros indígenas como el Montes, el Maldonado, el Patriciao, El Arévalo, gran colega de Montes, el Belisario, El Suarez, el Roa y muchos otros hasta casi doscientos...
Aquello pasó al compañs de la muerte de Juan XXIII y la crisis del Concilo Varticano II, durante el cual aprendimos el "Veni creator spiritu" y otros slmos en latín.
Los curas se sentía triunfantes y comenzaron a echarnos. No se olieron para nada la tostada de la filosofía vitalista de los sesenta con Sartre y los Beatles como paladines, y eso que ya por aquella época se hablaba de los curas comunistas y don Alfonso Francia, que había estudiado en Lyon, nos enseñó a cantar la Marsellesse delante de los civiles para demostarnos lo torpes que eran que no se enteraban de nuestro canto revolucionario.
Pero La marsellesa, sueño de noches de verano, pasaba desapercibida ante la procesión de las antorchas que se organizaba por las calles de Puebla de la Calzada el 23 de mayo, víspera de María Auxiliadora, anticipando un mes la nit del foc de San Juan.
El parentesis, para lo que importa ahora se alargó, unos diez o doce años. A la misma altura de los setenta vuelvo a encontrar a Eugenio Montes a los alrededores de Santana, Almendralejo. Yo me fui y el llegó, pero tuvimos noticias el uno del otro.
Muchos años después volveriamos a tropezar. Esta vez en Coslada, en la Casa de Extremadura. Había dejado yo una tarjeta con la intención de escribir un artículo sobre esta institución. Quien la recibió fue Eugenio a la sazon presidente de los extremeños asociados en Coslada. cuando volví pregunté. Me encontré con una tarjeta donde además de las direcciones variadas de Eugenio, campeaba un interrogante: ¿Tú eres el Talaván de verdad? Yo le contesté de forma gallega : ¿ Y tú el el Montes de verdad? Ambos éramos quien pensaba el otro que era.
El encuentro, nostálgico y glorioso terminó tal día como hoy, martes del último fin de semana de septiembre, en los encierros de los toros de Velilla de San Antonio. No funcionaba el carnet por puntos y los recuerdos, los rencores, las alegrias y en definitiva la memoria, corrieron parejos al vino hasta muy entrada la tarde.
Después vendría la reunión en hotel Quinto Centenario de Cáceres, en Torrejon de Ardoz, y en otras muchas ocasiones con casi todos.
Los últimos años de Eugenio Montes también fueron creativos y aventureros. Por eso terminó en el Mato Grosso y no presisamente en misiones, como nos predicaba aquel buen cura brasilerio a quien mandaron de vaciones a Puebla de la Calzada. La llamada de la selva era la más elemental de las llamadas: el creced y multiplicaos bíblico, o el pecado de Adan y Eva, cada cscoja lo más le apretezca.
El caso es que, aunque atento a esta última correría, de repente , un jueves por la tarde alguien marca el número de teléfono de casa. Es Lorena Montes, la hija de Eugenio. "Mi padre murió en Brasil, lo trajimos lo enterramos en Solana de los Barros en Badajoz, su pueblo natal. Celebramos un funeral en su honor en la igelis de San Pedro y San Pablo de Coslada el día 26 de sptiembre a las 9 de la tarde. Avisa a los amigos que puedas.
Entro en Internet. dejo mensajes en distintos foros. Busco el teléfono de fon Manuel Camargo, el Antonio Bahamonde y el Puebla de la Calzada. No doy con nadie. Jorge Roa , encuentro su colegio pero no a él. Por fin el mismo día 26 Luis, el socio económico de Eugenio de New Store, de da una salida: todos los compañeros conocen el evento.
Me proporciona el teléfono de Rogelio, ¡qué hisotria de la de Rogelio! Llamo a su casa. contesta su mujer. Esta tarde acudirá al funeral. Nos veremos.
Son las 18 y 45 hora de Madrid. Hasta las 21, queda margen para varisoas histrias más.-

domingo, septiembre 24, 2006

SEGUNDO DÍA ABORDO

24 DE SEPTIEMBRE.
Segundo día en este medio. Anoche, cuando volvimos a casa, después del baile de la plaza, la cocina se encontraba tomada por toda la juventud divino tesoro. Allí Beatriz, Teresa, Juan, Jenifer, Fabián, y dos muchachos más que no conocíamos. Esperaban al primo Marco. Esta mañana no sé cuantos han dormido en casa o cuantos se han levantado.

Seguimos con las cuentas del proyecto AMICA. Bien temprno me llama Christian para concretar la fecha de la visita a la Agencia Sócrates.

El periódico sigue lleno se snagra seca: esquelas de hace setenta años y expedientes de mujeres que murieron en las cárceles franquistas...

Sería interesante hacer una lista de los desaparecidos en Cabezabellosa. ¿Donde está el padre de Honorio y tio Prudencio? ¿Es cierto que tio Prudencio emigró a Nueva York?

sábado, septiembre 23, 2006

PRIMERA ENTRADA

Hoy, 23 de septiembre de 2006, comienza este blog. La idea es dejar cada día alguna curiosidad u opinión sobre lo que acontece en la calle. Podríamos empezar por comentar que son las fiestas de Velilla y, en consecuencia con la tradicción, hoy también llueve.
Pero también podría comentar la historia de la placa que ponen y regatean a Don Severiano Núñez, maestro de El Barrado, pueblo del norte de Cáceres. A Don Severiano lo asesinaron al comienzo de la Guerra Civil Española, como a otros muchos maestros, siguiendo la opinión de J.M. Pemán de que todos los maestros eran peligrosamente rojos.
Le pusieron una placa en la casa en que vivió. La casa pasó de mano en mano. Los últimos dueños no se muestran de acuerdo con que en su fachada se recuerde la memoria del maestro, y arrancaron la placa. Discuten si sujetarla en un soporte vertical y paralelo a la pared o deedicarle la calle entera. Ambas cosas serían razoinables y no excluyente. Buena crónica la Carmen Morán en El País. Ella es de ese pueblo: Barrado.
También se podría hablar de la comida de ayer en la Cárcel de Meco, Madrid 1 y 2. Las autoridades invitaron a un buen número de personas, entre las que me encontraba yo. También pincharon jamón y bebieron vino otros maestros rojos, poetas locos, sicólogos argentinos y militares con graduación.
Tampoco faltó la prensa. Por allí andaba Sonia Romero de El Diario de Alcalá y Paula Marta Temprano del Tribuna de Alcalá.
Pero hoy son las fiestas de Velilla y la noche blanca de Madrid. Toca comer, ver fuegos artificiales y escuchar la orquesta... "¡¡¡Cosita linda, mamá!!!
Pedro M. Talaván.