lunes, julio 02, 2007
GLOBALIZACIÓN
Mi hijo Juan ha llegado a Marsella junto con su primo Guillermo. Lisa, quien me ha regalado un cuadro, les recibirá con mil amores. Mi hija Beatriz regresa de Tubinga y espera a Fabian B., quien ya es médico y con trabajo en una población alemana de nombre impronunciable. Ella intenta irse a Alemania como profesora de español para extranjeros. La entrevista es uno de estos días. Teresa, mi segunda hija, ha viajado a Extremadura mientras prepara su viaje a Suecia: Upsala. Es lo que tienen quienes estudian física. El espacio europeo se ha vuelto tan pequeño que resulta más barato viajar por este territorio que desplazarse por lo que llamamos nuestras tierras. ¡¡¡¡ No son mías ni las alemanas, ni las suecas, ni las francesas ni las españolas!!!! ¿Quienes son los míos? Esta pregunta retórica se la dedico a Kety y a Puri. Y hay más: en el Copacabana, bar reciente en Velilla de San Antonio, regentado por brasilerios, en efecto -¿of corse?-, me encuentro con Pedro -no soy yo en este caso- con una panzá de güisqui de mucho cuidado. Pero lo mismo podría haber sucedido en cualquiera de las ciudades citadas o en el mismo Alcalá, Gijón, Jerez, Jaen, Burgos, Vigo o Méndez.¿Donde están los mios? la globalizasción presenta estos efectos...
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2 comentarios:
Esa pregunta que haces,y que nos dedicas, sólo la puedes contestar tú.
Ya veo que tus hijos están acortando distancias entre los paises de la vieja Europa, busacando,y quizás, encontrando lo que va a ser su destino.
Es posible que con el tiempo lleguen a ser más de allí que del pueblo que guarda su niñez,(como muchos de nosotros)y que confundirán los lugares cuando tengan hijos y crezcan allí. y todo se mezcle. Entonces serán de todos los sitios y de ninguno a la vez.
Pero antes o después sentirán un pellizco en el estómago, cuando oigan un nombre,o una canción, o un dato conocido del sitio aquél, de la calle aquélla,aunque al final el mismo cielo nos cubra a todos por igual.
Nada es de nadie,pero por desgracia, no todo es de todos.
Que conste que esto no es una contestación a nada, es lo que me ha sugerido.
Saludos Puri.
Hola, veo que tus hijos, como la mayoría de los jóvenes les gusta viajar, me parece extraordinario, siempre que se trata de un ir y venir. pero cuando se trata de quedar estancados lejos, y tengo la impresión que te va a pasar como a mi, la cosa cambia.
Cuando todo va bien, muy bonito, pero en momentos críticos te aseguro que se pasa mal.
Esto de la globalización está muy bien para los políticos, la economía, el intercambio de culturas..., que sí, nos beneficiamos todos. Pero ¿a consta de quien?
que conste que no soy de las que quieren tener a sus hijos en casa, me, nos va la independencia.
Al margen de este repertorio; todos somos del mundo y el mundo es de todos.
Un abrazo
Kety
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