sábado, marzo 21, 2009

POESÍA / PRIMAVERA

Las flores del cerezo de mi jardín dan la bienvenida a la primavera

" 21 de marzo,/principio de primavera,/ arrodilló Cristo Negro/ y dio con el tarro entierra./Dijo:/ de aquí no me levanto/ hasta que el tarro a enllenar no vuelva" se cantaba en en la dehesa extremeña para escenificar el momento en que las cabras daban más leche. Se unía así primavera, poesía y la alegría del cuerno de la abundancia. ¿Será por eso por lo que acordaron que el 21 de marzo sea el día de la posía?

Para celebrarlo adjunto un poema de mi amigo y compañero de internado en los sesenta, Emilio Ortega. Emilio Ortega es músico, poeta y soñador... Gracias Emilio por tu poema:


Escribió algun poeta diciendo que le causan respeto las leyes por las que se rigen la poesía academica. Yo es lo único que se hacer. para tí -amigo- te propongo un ejemplo humilde. Y lo hago no para que me enjuicies.Si no más bien para que reflexiones. Ya sabes que detrás de un poeta se esconde un hombre. porque " a sensu contrario"se esconderia un versificador. Si lo consigo me sentiré satisfecho, si no; seré y a mucha honra un versificador -eso sí- extremeño. A ver Pedro: pon tu el ritmo:

A VECES
A veces, tengo miedo al desconsuelo
del amor compartido en disonancia.

A veces, me entristece la distancia
que separa la tierra de mi cielo.

A veces, y a menudo, me consuelo
con los ratos alegres de mi infancia.
A veces, me consume la abundancia

de las penas que enjuga mi pañuelo.

A veces, simplemente me conformo

con el rumbo que sigue mi velero.

A veces, necesito el cloroformo

que me ofrece la lluvia de Febrero.

A veces, que es un siempre, me transformo
al cantar con mi nieto "El manisero".

se va,se va, el manisero se va, se va.....
con todo mi afecto para los blogueros de PMT emilio Ortega

lunes, marzo 16, 2009

LOS LINCES

Termina el día en esos balances radiofónicos donde las opiniones, cansas del día entero, sueltan un cierto fato a vino de sacristia y güisqui de pub. Entre ellas me llama la atención la "Operación Lincie".No quiero ofender a quienes, en algunas opiones que emito, me tachan de simplista- sus razones tendrán y posiblmente tan poderosas como las mías y por eso las respeto- y las que emiten otros, sobre una decisión tan tremenda y dolorosa como la del aborto, comaparándolo con la repruducción en cautividad de animales al borde de la extinción. Quiero defender a los linces y a las mujeres y llamar a la reflexión a ese "gremio" -ya sé que no les gusta que se les llame así- de hombres que odian a las mujeres, que pretenden ser "directores espirituales" de todos nosotros con nuestros propios dineros cuando lo que ofrecen es la condena a Galileo, la negación del placer, el infierno, la gloria para los que piensen como ellos pero en el cielo, ellos lo quieren aquí. He utilizado el ellos porque son todos varones: unos que aman a los hobres -homosexuales- otros a quienes atraen las mujeres - heterosesuales- y un buen montón - sin especificar porcentajes- a quienes les gustan los niños: pederastas. Son unos linces.

lunes, marzo 09, 2009

TIEMPOS REVUELTOS

En mi ordenador suena J.S. Bach en una versión jazzística. Mi mente vaga por la carretera de Extremadura y la nieve de toda la sierra de Gredos. Visito los blogs de los amigos y amigas y me encuentro con que Kety hace poeta a Don Quijote y Luz nos presenta una pintora brasileira. Pérez Comendador nos habla de un dibujante venezolano "de la republica Bolibariana" escribe él, Annabel pasea en bicicleta por la playa y escucha a Moriarty... Mucha gente vive en el mundo feliz en el cual cada uno se blinda. Admiro el optimismo y las ganas de vivir de todos vosotros, pero me gusta el güisqui que raspe la garganta, el café con poco azúcar, las naranjas, un tanto ácidas y, de los pimientos del Padrón, prefiero los que pican. Podriamos hablar del Ulster y no sólo para condenar el atentado sino también para preguntarnos por qué, de lo que pasa en Euskadi, en Galicia, en Valencia y en Madrid, incluso en la Asocición de Vecinos de Velilla. Tanta felicidad me empalaga, como el merengue...

martes, marzo 03, 2009

LA VEJEZ

Había quedado con Tertulino, Tertu, para muchos, "para ver como envejecemos" según expresión de él, hombre culto, cultivado y viajado. Sol, kilómetro O de esta España centralista, fue el lugar de la cita. Al instante comenzó la descentralización. Museo del Jamón, extremeño, Lardi, alemán, La casa de Soria, numantina, la calle Avemaría, multicultural... y la conversación se llenó de nostalgias, proyectos y recuerdos. El orden poco importa. Paseamos por el barrio de las letras con Quevedo, Cervantes, Lope, y toda esta gente que vivió como pudo y mientras pudo, hasta que nos encontramos con Le Pensateur, que junto a otras figuras -a mi se me figuran de plástico lo cual no les resta nada de creatividad- a la puerta de donde estalló una estación eléctrica, reparten su tiempo y justifican dineneros. Los teléfonos nos sirvieron de testigo del encuentro. Nuestras conversaciones fueron nuestras y al pensador de piedra le dejamos con esos mismos convidados andantes.

domingo, marzo 01, 2009

¿VELILLA CONETION?

Fue ayer, más o menos a esta hora. Buen tiempo. Beatriz limpiaba la yedra de la tapia del jardín y yo le ayudaba llevando los sacos a la basura. La Guardia Civil volvió. Durante una semana les víamos en los alrededores de Velilla. Había que superar sus controles y desde mediados de la semana pasada, pongamos el miércoles, dos, tres, uno, cuatro coches con agentes espectantes guardaban la calle. Ayer levantaron el "dispositivo" a eso del medio día. Dos horas después un hombre que vestía camiseta negra de manga corta y pistola al cinto, dio un aviso por la radio portátil. Aparecieron coches identificados y sin identificarse. Entraron en la taberna de El Buda y salieron con cajas, linternas y un detenido sin violencia. El detenido aún tuvo tiempo de saludar con la mano a quienes tomaban la caña en el bar de al lado. Arrancaron coches y coches. Parece que en cada uno viajaba algún invitado no deseoso de la invitación. La operación duró diez minutos. Poco despues, mis vecinos y amigos, los gitanos, llenaban de nuevo la calle de sonrisas y sueños infantiles. La novela negra en directo.