Aunque he pasado los úlitmtos años de acitvidad en Alcalá -los últimos años es toda una vida laboral, al rededro de veinte- no me deja de admirar esta ciudad donde estudiaron, entre otros, Quevedo y Lope de Vega. Sus nombres figuran en el edificio de la facultad de derecho que antes fue cuartel, cárcel y colegio , que se lo pregunten a mi suegro que hizo allí la mili, y antes convento de Jesuitas. Es lo que tiene: un edificio bien hecho, siempre es un edificio bien hecho, como la casa portuguesa, vaya.
Pero quería hablar de dios y el diablo: en Alcalá hay un exorcista, un curilla que se dedica a esos menesteres de luchar contra el diablo cuepo a cuerpo. Como San Gabriel, pero en contemporáneo. El prestigio del clérigo es más bien escaso, porque se lleva lo políticamente correctos en USA y El Vaticano sólo es el impererio disminuido de la moral - del moral- políticamente correcto imitnado al imperio sin adjetivos. Pero el mundo se empecina: es bueno y malo, la linde es indefinida y un bando y otro, tambien, pero ¿puede cualquier dios prescindir de su enemigo? ¿ tiene sentido ser bueno si no hay malos? ¿tiene sentido el infierno sin el cielo o viceversa? ¿tiene sentido esta entrada? No pero me apetecía escribir sobre el asunto...
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